Lisboa acogió la IV edición de Condé Nast International Luxury Conference «The Language of Luxury», que se celebró en el Patio de Galé, situado en la emblemática Praça do Comércio, el pasado 18 y 19 de Abril. La industria del lujo invadió las centricas calles de la capital portuguesa, que se llenaron de cientos de invitados que acudieron para escuchar las ponencias de decenas de expertos del lujo.
La conferencia, organizada por el grupo Condé Nast y Vogue, estuvo conducida y protagonizada por la editora internacional de la publicación, Suzy Menkes, y fue inaugurada por Jonathan Newhouse, jefe ejecutivo de Condé Nast.
En la primera jornada se hizo hincapié en las posibilidades que poco a poco llegan gracias a las nuevas tecnologías y los «millenials», un concepto que estuvo presente en muchas de las ponencias, y que comenzó con la conferencia de Alexandre Arnault, el co-CEO de Rimowa.
Arnault, integrante de la generación «millennial», quiso desterrar los miedos de la industria del lujo hacia este nuevo público más joven, más exigente y más informado. Como nativo digital, el empresario remarcó el impacto de Instagram en la percepción del consumo.
En la misma línea se manifestó Sophie Hackford, de profesión «futurista», cuya labor consiste en conocer y predecir el desarrollo de la tecnología y sus aplicaciones para guiar a las empresas.
La editora de VOGUE Portugal, Sofía Lucas continuó la exposición haciendo alarde de las posibilidades estilísticas de calidad que el país luso tiene, siendo un claro ejemplo Paula Amorim, la siguiente ponente que habló de un nuevo concepto de la moda de lujo y estilo de vida centrado en el mercado minorista para compradores de todo el mundo. Creación e innovación a la que se unió Alfredo Orobio, creador de Awaytomars, presentando un lado alternativo de la moda con un proyecto de diseño colectivo y cooperativo.
Uno de los invitados más esperados y aclamados fue el diseñador de calzado y accesorios Christian Loubotin, que centró su ponencia en la inspiración que utiliza para sus creaciones. El francés, en una entrevista con Suzy Menkes y con varios modelos de zapatos de suela roja en la mesa, explicó que se basa en los recuerdos de su vida. La otra protagonista de la jornada fue Maria Grazia Chiuri, la directoria creativa de Dior, que habló del poder de la mujer en esta industria.
Carlos Jereissati Filho, Ara Vartanian y Alexandre Birman presentaron empresas emergentes y exitosas de lujo de Brasil. La marca Portugal no podía ser menos y los creadores de la firma lusa Marques’almeida hablaron del éxito de sus diseños en Londres. Por su parte, el diseñador italiano Giambattista Valli expuso la importancia de la relación con los clientes en una empresa de lujo. La jornada finalizó con la ponencia de la conocida actriz Hillary Swank, ganadora de dos Oscar, que habló de la línea de ropa de lujo que ha sacado.
La segunda y última jornada comenzó intensa con la entrevista de Suzy Menkes al diseñador Philipp Plein, que no dudó en argumentar su altiva visión de la moda de lujo. China y África fueron las culturas protagonistas durante el jueves. El país asiático estuvo representado por la esperada diseñadora Simone Rocha, el fundador de la firma K11, Adrian Cheng, y Angelica Cheung, editora de «Vogue» China. El continente africano tuvo a Vania Leles, creadora de su propia marca de joyas y Uche Pézard, creador del grupo Luxury Connect Africa.
España también participó en la conferencia de la mano de Eugenia de la Torriente, editora de «Vogue» de nuestro país, que participó entrevistando a Johnny Coca, el director creativo de Mulberry. Hervé Pierre, diseñador de Melania Trump, fue uno de los más destacados al hablar con naturalidad y simpatía de qué significa diseñar para una primera dama. Los directores creativos de Bottega Veneta y de Lacoste completaron el cartel de este segundo día que finalizó con el anuncio de que la próxima edición se celebrará en Sudáfrica.