Después de este lujoso tratamiento la piel reaparece suave y luminosa, pero los beneficios de este nuevo protocolo van más allá. A través de la combinación de luz LED; un masaje facial exclusivo de Carmen Navarro de descontracturación y reafirmación muscular, más la aplicación de anti-oxidantes de Skinceuticals, la piel se ve mejor por fuera – y está aún mucho mejor por dentro, fortalecida frente a las agresiones externas.

Se comienza con una suave limpieza según el tipo de piel, que re-equilibra y prepara el tejido.

Si la cliente se siente estresada o cansada, se la introduce en la Bolsa de Ozono. Este tratamiento envuelve a la cliente en un saco que le cubre hasta los pies y se cierra herméticamente a la altura del pecho, introduciendo ozono en este espacio. Absorbiendo el ozono de forma transcutánea, el cuerpo se oxigena, lo que tiene un efecto revitalizante y estimulante. Además, el ozono activa la microcirculación, por lo que relaja y deshincha las piernas.

Se exfolia el rostro con un peeling que se realiza mediante un masaje de acción también drenante, que a su vez estimula la microcirculación epidérmica.

A continuación, se aplica una luz LED escogida en función del tipo de piel y preocupación del cliente. Según la luz utilizada se pueden combatir manchas, falta de luminosidad, arrugas, flacidez o acné.

La terapeuta trabaja todo el rostro con un masaje de remonte, de acción también descontracturante. Estimulando toda la musculatura facial, especialmente la del área de la mandíbula, se relaja la tensión del rostro y se desbloquean contracturas: para ello, incluso se trabaja en el interior de la boca con la ayuda de guantes de goma.

Con la piel perfectamente preparada, llega el turno de la aplicación de una mascarilla de vitamina C, que además de ser antioxidante regula la hiperpigmentación y potencia la luminosidad.

Se retira y se concluye el protocolo con los tres pasos básicos de SkinCeuticals: prevenir (con un cóctel de antioxidantes con vitamina C que reduce arrugas, da firmeza y uniformiza el tono de la piel), corregir (utilizando productos específicos según el tipo de piel del paciente) y proteger (con un protector anti rayos UV).

Duración: 70 minutos.

Precio: A partir de 90 euros.

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