Castillo de Canena, primera empresa oleícola en recibir certificación por su Gestión Ética y Socialmente Responsable

Castillo de Canena ha sido la primera empresa oleícola del mundo en validarse con la certificación  SGE21 en Responsabilidad Social Corporativa, siguiendo la norma europea regulada por FORETICA.

Castillo de Canena entiende que la excelencia no radica solamente en los procesos de producir y comercializar uno de los mejores Aceites de Oliva Virgen Extra del mundo. Las empresas deben apostar también por la ética y por los valores corporativos, con unas líneas de conducta que respeten los principios de la solidaridad y la identificación con el territorio y la salud del Planeta.

En Castillo de Canena apuestan por la sostenibilidad. Cuidan el ciclo natural del árbol conjugando la sabiduría tradicional con la tecnología más avanzada y el respeto escrupuloso al medio ambiente en todo el proceso de elaboración del aceite. Desde su recolección, su transporte, su molienda, su batido, su decantación, filtrado y conservación, hasta su embotellado final. Y todo ello, lo hacen apostando por la innovación para conseguir unos aceites exquisitos, más vivos.

Pero no solo eso. Su excelencia radica también en su actividad y acciones como empresa, en materia de relaciones laborales, igualdad de oportunidades, responsabilidades y retribuciones, políticas con proveedores, nivel de satisfacción de sus clientes, apoyo al territorio, protocolo de sostenibilidad, transparencia y prevención de riesgos laborales.