LUXURY SPAIN

Caviaroli perlas de frutas

gourmet - 1 min de lectura
27/01/2023

Caviaroli expertos innovadores del caviar de aceite. Este miembro de la Asociación Española del Lujo – Luxury Spain, trae como lanzamiento más reciente Caviaroli perlas de frutas.

Caviaroli perlas de frutas

Caviaroli es una explosión de sabor que recoge intensidad y aroma. Esto se consigue mediante una tecnología de encapsulación que permite obtener una esfera de textura igual a la del caviar. Caviaroli rompe en la boca, permitiendo al comensal disfrutar de un estallido de frescor en esta misma.

Los nuevos Caviaroli de frutas de mango, limón y frambuesa, hacen perfecto maridaje con ensaladas, pescados, foie y postres.

Conservación de caviaroli

La mayoría de los productos de Caviaroli se envasan con un tiempo de vida de 15 meses, pudiendo variar en algunos productos hasta los 12 meses.

Sin abrir Caviaroli debe guardarse en lugares frescos y secos alejados de fuentes de luz, calor y olores fuertes. El rango de temperaturas ideal es de +6ºC a +26ºC.

Una vez abierto conservar refrigerado sin llegar a temperaturas de +2ºC y consumir en un mes.

Temperatura de fusión

Caviaroli aguanta en el emplatado hasta 65ºC durante al menos 10 minutos sin fundirse. La exposición a temperatura elevadas +45ºC durante períodos prolongados de tiempo puede provocar su degradación, por ello es muy importante no guardarlo junto a una fuente de calor.

Caviaroli es un ingrediente, una herramienta, proveniente de la cocina profesional que simplifica y democratiza el acceso a la cocina molecular y de vanguardia a todo el mundo independientemente de sus aptitudes culinarias. Es una gran forma de aportar un toque sofisticado e innovador a cualquier receta, sencilla o compleja.

Se recomienda colocar el Caviaroli justo antes de servir el plato para asegurar que la experiencia de consumo es la mejor posible, pero aún y así las perlas de Caviaroli pueden aguantar en el plato hasta 2 horas sin problema. El único inconveniente es que con el paso de los minutos la poca humedad que alberga la gelatina de las perlas se irá evaporando lentamente hasta dejarnos una membrana muy fina y por lo tanto más débil sin llegar a romperse si no se manipula.