Licores Baines «se tiñe» de blanco

Todavía faltan unos meses para recoger las endrinas con las que elaborar el pacharán Baines pero, en esta época los campos se llenan de hojas que dejan las parcelas literalmente blancas y dan datos sobre las cosechas.

Los campos de endrinas, localizados en Sesma (Navarra) es ahora cuando sacan su delicada flor blanca. El porcentaje de cuajado en el endrino es muy bajo y no todas las flores acaban siendo arañones, pero su aspecto permite detectar posibles daños, heladas o enfermedades en la parcela.

A pesar de los cambios climatológicos de los últimos días, los campos de endrinas están sanos y fuertes, y ello hace intuir que la cosecha de 2017 será de gran calidad.

Las endrinas se recogen normalmente hacia septiembre, pero hay años que varía, dependiendo del clima de ese año. Una vez se recoge el fruto, por un sistema de vibrado para evitar daños en el árbol y en las endrinas, se limpia y se mete en sus respectivos depósitos con el anís.

El tiempo de maceración varía dependiendo de la endrina y al producto al que se destine. Por ejemplo, si se emplea para el Pacharán Baines Etiqueta Oro -el de mayor calidad-, se deja macerar en barrica de roble de 500 litros durante unos seis meses. Si es para el Pacharán Baines Clásico, el tiempo en el macerador es de unos 4 a 5 meses en depósitos de acero inoxidable.

El resultado es un producto de fabricación artesanal, compañero indispensable de fiestas, celebraciones y sobremesas de la buena mesa.