LUXURY SPAIN
Pablo Garrigós Ibáñez: el sentido del gusto
Desde hace casi 30 años Pablo Garrigós Ibáñez fabrica una amplia gama de turrones, dulces y chocolates que se caracterizan por su carácter totalmente artesanal pero principalmente por la calidad, que hace que hoy día sean considerados como los mejores turrones gourmet. El obrador está ubicado en Jijona, considerada la cuna del turrón, donde mejor se sabe elaborar estos tradicionales dulces desde hace siglos.
El catálogo de la firma está compuesto por los clásicos turrones tradicionales a los que se añade una amplia gama de dulces y chocolates que sorprende por su variedad y originalidad. Para elaborarlos, Pablo Garrigós Ibáñez pone en práctica la experiencia acumulada durante más de un cuarto de siglo, cerca de tres décadas fabricando productos siempre bajo un proceso de elaboración muy cuidado en el que solo se utilizan materias primas seleccionadas de primerísima calidad.
Se utiliza la mejor almendra, la Marcona, producida en la cuenca mediterránea. Además, otro de los ingredientes principales del turrón, la miel, se elige siempre de romero o azahar, flores con las que se consigue un sabor único y muy especial. Son ingredientes totalmente naturales con los que se trabaja con el máximo cariño durante el proceso artesanal, como el de toda la vida, para que casen a la perfección y que lo que se obtenga sea un producto exquisito.
Sus productos se presentan con un atractivo diseño, esmerado y de alta calidad, que esconde auténticas joyas en dulces que se convierten en un auténtico capricho gourmet.
La gran familia de productos continúa creciendo e incorporamos novedades cada temporada, como los turrones de la línea Artisan Collection o Chocolate Vintage, una nueva creación que el maestro pastelero de Pablo Garrigós Ibáñez ha elaborado fusionando los sabores más emblemáticos de la casa, con notas nuevas y exóticas, inspiradas en el Mediterráneo y en sabores procedentes de otras partes del mundo.
La línea de turrones Artisan Collection supone un viaje a los antepasados familiares, pues recoge una cuidada selección de recetas, artesanas y ancestrales, que han estado en el seno de la familia desde hace décadas. Todos los productos poseen unas características comunes que son la esencia de esta firma: la calidad de las materias primas, la tradición y experiencia que se aplica al proceso de elaboración, el cariño con el que se trabaja cada día para que el consumidor quede satisfecho… Y es que cada uno de los productos que sale de su obrador es un regalo para el cliente, y debe responder a las más altas expectativas. Con ese objetivo se trabaja a diario en Pablo Garrigós Ibáñez y conseguirlo es su mayor satisfacción.