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Carmen Navarro, 37 años de experiencia en el mundo de la estética

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12/04/2011

Carmen Navarro comenzaba su andadura en el mundo de la estética hace ya 37 años, camino que le ha llevado hasta el éxito del que goza hoy en día, mientras disfruta de su trabajo y aún no piensa en la jubilación
Carmen Navarro
Carmen Navarro: «La imagen es cada vez más
 importante, nuestra tarjeta de visita»
Carmen Navarro hoy en día significa en España un exponente de la belleza y por ello numerosas famosas no dudan en acudir a sus centros para disfrutar de los mejores tratamientos.
   – Hoy en día, ¿cuáles son las claves de la belleza?
– Para mi es la armonía, es decir, una persona bella no sólo es la que tiene el pelo bonito, sino que es un conjunto. La piel es fundamental porque es una de las cosas que primero se ven. Y yo creo en la estética preventiva, evitar el envejecimiento, porque una vez que ya hemos envejecido ya es más complicado.
– ¿E interiormente?
– Interiormente es fundamental estar en armonía con uno mismo. Creo que una de las claves de la juventud y la belleza es el ser feliz, el amar y que te amen, el quitarte los miedos. Creo que eso es clave para no envejecer porque el envejecimiento lo producen todas esas cosas. Es fundamental estar aquí y ahora y no estar pensando en el pasado.
– Comenzó su andadura hace muchos años, si echa la vista atrás…
– Sí, ya hace 37 años. He sido muy feliz, tengo que presumir, a pesar de todos los problemas que tiene la vida, yo he sabido ir saliendo de ellos y soy muy feliz haciendo lo que hago. Yo he podido haberme jubilado hace muchísimos años y estoy aquí porque me gusta, porque disfruto.
– Sus centros se han convertido en centros estrella en España, ¿se lo imaginaba?
– Bueno, yo trataba de hacer las cosas cada día lo mejor posible, dar a mis clientes lo mejor y el resultado es ese. Es decir, que a mí no me han regalado nada, realmente yo he dado muchísimo, entonces que la consecuencia sea que haya llegado a donde he llegado para mi es normal.
Carmen Navarro, centros de estética en Madrid y Sevilla
– Cuando hablan en los medios de comunicación sobre sus centros, ¿se siente halagada?
– Yo no quiero tener un ego grande, yo creo que es una consecuencia de todo lo que hago. Me siento halagada, pero no soy presuntuosa. Yo doy las gracias a todo el mundo, porque si yo soy muy buena, pero no me conocen porque los medios no hablan de mi, pues no sería nadie.
– ¿Cómo se siente al ver que hasta la realeza haya confiado en su centro?
– Para mi es un orgullo y una satisfacción, me siento feliz.
– Usted fue toda una pionera, introduciendo las técnicas orientales en España…
– Yo como pionera desde que empecé a trabajar busqué lo mejor y yo me daba cuenta de que había cosas que no me encajaban. Si una mujer llegaba muy estresada y si yo no la rodeaba de velas, incienso, apagaba la luz, la música adecuada, rodeada de ese calor y relajarla, pues no iba a conseguir resultados y no sabía disfrutar de lo que estaba haciendo. Yo cogí lo mejor de oriente.
– ¿Qué importancia tiene para usted la investigación?
– Es fundamental. Hemos ido evolucionando y mejorando y es fundamental. La investigación es porque hay algo más allá y la esperanza de que hay algo más, también nos rejuvenece. Porque si pensáramos que ya hemos llegado al límite, tiras la toalla. Creo que es fundamental.
– ¿Qué futuro le ve a Carmen Navarro?
– Pues ahora ampliamos, montamos en El Corte Inglés de Castellana. Con lo cual, creo que en expansión, siempre en expansión.
– ¿Cuál es la mejor carta de presentación de Carmen Navarro?
– Que lo que prometemos lo cumplimos. Nuestros clientes tienen un diagnóstico exhaustivo, normalmente hecho por mi, van a recibir lo mejor en cosmética, en aparatología y en todo.
– Entonces, ¿prima el tratamiento personal por usted a cada clienta?
– Les encanta. Me encantaría que no se siguen sorprendiendo de que esté en Agosto o en un puente. Es decir, que yo siempre estoy ahí. También tengo mis viajes y mis cosas, pero procuro estar al máximo.
– ¿Cree que esa es la clave?
– Yo creo que es muy importante. Aunque bueno, yo tengo gente buenísima que me sustituye, como puede ser mi hermana, mi sobrina Carmen… Yo tengo gente muy buena. Pero a la gente le gusta verme, yo creo que porque les doy tranquilidad, porque son muchos años.