Tomás Villén: «Si algo ha caracterizado siempre a Porsche es su capacidad de innovación»
Tomás Villén, CEO de Porsche Ibérica.
Defina brevemente qué significa para usted conducir un Porsche.
Diversión, placer, satisfacción y seguridad. Independientemente del modelo de la gama del que se trate, un Porsche tiene un tacto de conducción especial, es un deportivo con mayúsculas que transmite sensaciones únicas al volante. Pero también me produce satisfacción saber que llevo un coche respetuoso con el medio ambiente, que está fabricado en una planta con impacto cero en la huella de carbono.
¿Cuál es la mayor motivación de su trabajo?
Las personas, tanto las que forman el equipo de Porsche como nuestros clientes, y también el legado de esta compañía. Somos una marca con 73 años de historia, pero que seguimos fieles a los valores e ideas del fundador, Ferry Porsche. Él no solo fue un visionario en el producto, sino también en la forma de entender la empresa, cuidando de sus empleados y sus clientes, al mismo tiempo que se preocupaba por la sociedad en su conjunto. Hoy, aunque los tiempos han cambiado, los principios siguen siendo los mismos y eso hace que la gente que trabaja en Porsche se sienta orgullosa, orgullosa de los coches que hacemos y de los valores que transmitimos.
En cuanto a los clientes, tengo el privilegio de hablar personalmente con algunos de ellos y, además, organizamos con frecuencia eventos que me dan la oportunidad de mantener un contacto muy directo. Sus comentarios, positivos en un porcentaje altísimo, nos ayudan a mejorar de forma continua.
¿Cómo se ha adaptado la marca a un entorno tan cambiante y afectado por la constante innovación tecnológica?
Si algo ha caracterizado siempre a Porsche es su capacidad de innovación. Por eso, podemos decir que no nos adaptamos a los cambios sino que nos anticipamos a ellos y los lideramos. Tecnologías tan importantes en la actualidad como la conectividad o la digitalización forman parte de nuestros coches y de nuestras fábricas desde hace años. Y lo mismo ocurre con aspectos como la sostenibilidad y la electrificación. Porsche se ha fijado como objetivo para 2030 la huella de carbono neutra, con todo lo que eso conlleva. En cuanto a modelos electrificados, la mitad de nuestras ventas de este año en España y Portugal estarán electrificadas y en 3 años superaremos el 72%.
¿Qué características acompañan al nuevo Porsche Taycan Turbo que no se había visto hasta el momento?
Con el Taycan, fuimos pioneros en introducir la tecnología de 800 voltios en un automóvil eléctrico de producción en serie. Previamente lo habíamos probado con éxito en competición y los resultados fueron tres títulos de campeones del mundo de resistencia consecutivos y otras tantas victorias en las 24 Horas de Le Mans, la carrera más dura del planeta. Gracias a esa tecnología de 800 voltios, el Taycan ofrece las mejores cifras de aceleración durante muchas ocasiones consecutivas, sin perder rendimiento, algo infrecuente en los vehículos eléctricos. Otra ventaja de este modelo es la posibilidad de utilizar puntos de carga ultrarrápida, con los que recuperar un alto porcentaje de la capacidad de la batería en pocos minutos.
Pero lo mejor es que hemos conseguido aprovechar todas las ventajas de un coche eléctrico sin perder un ápice de las cualidades deportivas que caracterizan a cualquier Porsche, porque el Taycan no solo tiene unas prestaciones excepcionales sino también un comportamiento digno de los grandes deportivos.
Un lugar para perderse y desconectar conduciendo el Porsche Taycan.
Cualquiera. Le aseguro que ponerse al volante de un Taycan ya invita a la desconexión y a disfrutar conduciendo sin necesidad de algo más. El sonido de marcha, la calidad percibida en cada detalle, los acabados de su interior o las enormes posibilidades que nos ofrece todo su entorno digital son suficientes para aislarse de los problemas diarios. A partir de aquí, cualquier carretera es perfecta para comprobar el dinamismo del mejor deportivo eléctrico del mundo.
Fotografía de Tomás Villén, CEO de Porsche Ibérica.
¿Cómo cree que será el consumidor automovilístico del futuro?
Ferry Porsche decía que el último coche que se fabrique será un deportivo. Por eso, independientemente de que los clientes exijan cada vez más cosas alrededor de un coche, como por ejemplo, la conectividad absoluta que permita interactuar entre el vehículo y cualquier dispositivo electrónico, siempre habrá un público apasionado que, sin renunciar a esas otras cosas, sabrá apreciar la tecnología y la satisfacción que supone ponerse al volante de un automóvil como los que fabrica Porsche.
A lo largo de los años, las compañías han tenido que adaptarse al contexto económico, tecnológico, sociocultural y político de cada momento. ¿Qué aspectos han querido conservar desde el origen de la marca hasta ahora teniendo en cuenta dichos cambios?
Nuestro espíritu emprendedor y pionero. La sociedad marca el camino, pero nosotros debemos ser capaces de aportar soluciones que se adapten a sus demandas e, incluso, que vayan más lejos de lo que se nos pide. En Porsche siempre ha sido así. Por ejemplo, mucho antes de que en el mundo existiera la concienciación por el medio ambiente que hoy tenemos, Porsche desarrollaba tecnologías que favorecían la reducción de emisiones contaminantes: desde la inyección directa de combustible al catalizador, pasando por la transmisión de doble embrague. Otro dato interesante: Porsche fue el primer fabricante en ofrecer tres modelos híbridos enchufables en su gama.
Explíquenos una experiencia que sin duda le inspiró a crear alguno de los modelos actuales.
Hace unos años, yo no estaba convencido de que estuviéramos preparados para los vehículos eléctricos. Entonces mi jefa, Barbara Frenkel, me pidió que viajara a Noruega. Estuve una semana y me entrevisté con autoridades, concesionarios y directivos de la marca allí. Realmente era otro mundo; el coche eléctrico estaba plenamente integrado y se vivía con absoluta normalidad. A partir de ahí me dije, si queremos trasladar esto a España tenemos que ser nosotros mismos los impulsores de las infraestructuras y crear un auténtico ecosistema de electromovilidad; no podemos esperar a que lo que haga la Administración. Y en eso estamos. Hemos lanzado el Taycan hace poco más de un año y gracias a la contribución de una pequeña empresa como la nuestra, viajar de un punto a otro de la península ibérica con un coche eléctrico ha dejado de ser una aventura.
¿Considera que el lujo es algo material o experiencial?
Puede ser material o no, pero experiencial, sin duda. Cualquier objeto, por lujoso y exclusivo que sea, si no te provoca algún sentimiento especial no vale la pena. Un artículo de lujo te tiene que hacer disfrutar, te tiene que provocar satisfacciones que vayan más allá de lo habitual.
Y por último, cuéntenos, ¿cuál es su modelo de automóvil favorito?
Un Porsche, seguro, pero depende de cada momento. Afortunadamente, por mi cargo tengo la opción de ir cambiando entre los distintos modelos de la gama. Ahora utilizo un Taycan a diario, pero adoro el 911, me divierto con los deportivos de motor central (el Boxster y el Cayman), uso nuestros SUV Macan y Cayenne para escapadas familiares y, si el viaje es muy largo y hay que hacerlo de un tirón, no hay nada como el confort y la deportividad de un Panamera.